Mi amiga Violeta era muy curiosa. Una vez se preguntó qué
era la muerte.
No se supo responder, así que le preguntó a sus papás. Pero al
obtener respuestas diferentes comenzó a dudar. Quiso preguntarles a los vecinos, pero de ellos también
recibió distintas respuestas.
Decidió entonces viajar por el mundo preguntando qué es la
muerte, en cada puerta de cada casa, de cada país, de cada continente.
También
de todos ellos recibió distintas respuestas.
Al recibir respuestas diferentes de cada persona del mundo finalmente
dejó de insistir.
Un año después yo iba a buscarla a su casa para jugar. En su
puerta, tocando el timbre, había una persona encapuchada (o tal vez era un
monstruo). Me escondí entre los arbustos de la casa vecina y esperé en
silencio. Violeta, al abrir, por unos segundos quedó perpleja; aunque en
seguida recobró el aliento y le preguntó: “¿Qué es la muerte?” Y el fenómeno
respondió: “La muerte eres tú”.
Volví a mi casa un poco asustada y decidí no contarle a
nadie sobre lo ocurrido. Desde ése día nadie, absolutamente nadie, volvió a ver
a la querida y curiosa Violeta (Que En Paz Descanse).
FIN
Este cuento lo hice hace 3 años.. Cuando tenia 10 años.
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